Una de las premisas de EPM durante el atención de la contingencia en el proyecto hidroeléctrico Ituango ha sido la transparencia y apertura en la información. Como parte de este compromiso hemos mantenido contacto permanente con ustedes a través de estos comunicados.
En esta oportunidad nuestro propósito es dar claridad frente a las supuestas afectaciones ocasionadas por EPM a la zona de La Mojana, en los departamentos de Sucre, Córdoba y Bolívar, las cuales vienen declarándose en el escenario público desde hace varios días.
Como les contamos en su momento y, de igual manera, se informó en diferentes medios, el pasado 5 de febrero realizamos el cierre de la última compuerta que permitía el paso del agua por la casa de máquinas. Esta fue una decisión responsable, basada en la necesidad de salvaguardar la seguridad de las comunidades aguas abajo del proyecto, ante el posible riesgo de perder el control del flujo de agua que ingresaba desde el 10 de mayo de 2018 a esta área del complejo hidroeléctrico en construcción.
Este cierre implicó, durante tres días, la reducción del caudal del río Cauca aguas abajo del proyecto. Fue el tiempo necesario para que el embalse alcanzara la cota 401 y comenzara a darse el paso del agua de manera natural a través del vertedero. Esta acción permitió recuperar gradualmente y en pocos días el caudal normal del río para esa época del año.
Es de nuestro interés que usted y toda la comunidad tenga la mayor claridad respecto a que durante esos tres días el río Cauca, aunque presentó una disminución en su caudal, no estuvo seco en ninguno de sus tramos, pues desde el sitio de presa continuaron saliendo pequeños caudales y progresivamente eran alimentados por los afluentes que desembocan aguas abajo del proyecto. Además, desde EPM con el fin de mitigar el impacto al río Cauca, específicamente en la zona de La Mojana (de Sucre, Córdoba y Bolívar), se realizó la descarga programada de agua desde sus centrales Porce II y Porce III que desembocan en el río Nechí y desde este al río Cauca, logrando mantener los caudales y niveles asociados al momento del cierre de las compuertas del proyecto Ituango.
Lo anterior da cuenta de que la problemática que se dio en esta parte de la región estuvo, en realidad, asociada con la fuerte sequía originada por el fenómeno de variabilidad climática que se presentaba en ese momento y la cual fue documentada por el IDEAM.
Un aforo de caudal realizado de manera conjunta entre el IDEAM y EPM, justo después de la desembocadura del río Nechí al río Cauca, indica que el viernes 8 de febrero, antes de iniciarse el vertimiento en el proyecto Ituango, el caudal estaba en 640 m³/s, lo que se considera normal para esa época del año, solo 10 m³/s menos de lo que venía presentando en días anteriores (650 m³/s) y con caudales similares registrados en los años 2016 e incluso superiores a los registrados en 2010.
Con estos datos, basados en mediciones realizadas con alto rigor técnico, queremos reafirmar que cuando cerramos la segunda compuerta de la casa de máquinas de proyecto, la disminución en el caudal del río Cauca solo se presentó entre el sitio de presa y el municipio de Nechí, ante lo cual EPM estableció las acciones necesarias para mitigar los impactos ocasionados y continúa comprometida con la recuperación de este territorio.
Agradecemos nuevamente toda su atención y disposición para recibir la información que periódicamente le estamos proporcionando y continuaremos firmes en nuestro compromiso de brindarle información transparente y oportuna.
Comunicado de gerencia de EPM.