Según las más recientes cifras de XM, compañía que administra el mercado de energía en Colombia, en mayo se presentó la jornada con el mayor nivel de potencia del sistema en uso. Más exactamente , el 2 de mayo fue la jornada en la que todo el sistema más trabajo desde enero de 2017.

La tendencia es sostenida y hay varios datos que lo confirman. Entre enero y mayo de este año, la demanda de energía creció 4,37%, más del doble del ritmo de crecimiento en el mismo período de 2018, cuando fue de 2,56%. En los últimos doce meses terminados en mayo, el crecimiento fue de 4%, mientras que en el mismo periodo de 2018 había sido de 2,4%.

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El director ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg), Alejandro Castañeda, explicó que se puede observar un crecimiento sostenido en este indicador desde el primer trimestre de 2018.

“De hecho, frente a los escenarios de crecimiento que proyecta la Upme, hace un año, 2018, durante el primer trimestre, la demanda real estaba en la parte baja de los escenarios menos optimistas. Pero este año ya entramos con demanda real en el área de las proyecciones altas”, comentó.

Dentro de las causas que explican la tendencia están el buen comportamiento de la Costa Caribe, cuya demanda de energía crece casi 7%, y también el comportamiento de la industria, especialmente jalonada por lo que ocurre con sector petrolero y minero.

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“Este dato de la Costa es importante, porque ese mercado representa 23% del total nacional”, explicó.

En las cifras también se destacan agricultura y construcción que tienen consumos de energía sólidos.

Si esta tendencia se mantiene, es de esperar que los resultados de crecimiento económico muestren sorpresas a los largo del año. Aunque la balanza comercial viene mostrando cifras de déficit superiores a US$2.000 millones en los primeros meses del año, un dato da para esperar mejores cosas en materia de PIB: vienen creciendo a un ritmo importante las importaciones de bienes de capital. Esto significa que las empresas están fortaleciendo sus capacidades productivas e industriales. Así, cabe esperar que el consumo de energía se fortalezca. Vale la pena preguntarse si la economía está viendo luz al final del túnel, dada la importancia que tiene este indicador en el PIB.