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    Paneles solares ya llevan energía a facultad de Minas de la U. Nacional de Colombia

    A la pregunta ¿por qué paneles solares en la Universidad Nacional? y ¿por qué esa apuesta hacia la sostenibilidad que lidera la sede Medellín?, Verónica Botero, decana de la Facultad de Minas, no duda en responder que el planeta nos está dando un mensaje que debemos atender.

    “Parece que estuviera gritando que no nos va a durar mucho más y que hay que tomar acciones. Entonces, si nosotros desde la academia, que sabemos lo que está pasando, que tenemos esa certeza de que estos recursos son finitos y que se pueden agotar, y que conocemos las soluciones, no lo hacemos, ¿entonces quién?”.

    Con esa determinación y esa mirada del entorno empezó la idea de los paneles solares capaces de generar energía eléctrica para reducir los costos en las facturas y el impacto ambiental de manera paralela.

    Eso es precisamente lo que hacen estos módulos fotovoltaicos, comúnmente conocidos como paneles solares: implementan la tecnología a su favor cambiando la forma en que se generan y se consumen los recursos energéticos y lo vuelven un sistema sostenible.

    Los módulos solares

    Funcionan como una imitación de las hojas en su proceso de fotosíntesis. Adquieren las emisiones de rayos UV del sol y, por medio de transformadores, traducen la energía solar a energía eléctrica.

    La idea de instalarlos surgió desde 2019 con una línea de acción llamada Campus sostenible y amable, que contenía siete áreas para convertir la Facultad de Minas en un espacio más amable con la comunidad que la habita y con el entorno que la rodea.

    El proyecto fue presentado con un presupuesto de 150 millones de pesos que se aprobó por el Plan de acción de sedes y que se llevó a cabo hasta este mes de enero donde quedó implementado por completo, explica Botero.

    Para ello “se realizó una medición de consumo energético que permitió analizar el gasto de cada bloque y evaluar de qué manera se podía minimizar y reducir el impacto ambiental”, narró Juan Pablo Suarique, ingeniero electricista de proyectos de la línea estratégica de Gestión Integral Energía y Agua.

    Fruto de esa medición se concluyó que el Bloque M8B, de la facultad, era el indicado para iniciar la prueba piloto. Y así fue. El proyecto se puso en marcha y la empresa Solenium, dirigida por un grupo de egresados de la Universidad, fue la encargada de hacer el montaje.

    Sobre el sistema

    Los módulos solares implementados transforman la energía para usarse inmediatamente. En otras palabras, no tienen la capacidad de almacenarla porque no poseen baterías, un hecho que parecería negativo porque obliga al edificio a usar la energía tradicional en las noches pero que es todo lo contrario.

    “Este sistema es más rentable para la Universidad y más sostenible para el medio ambiente. Usar baterías implicaría que los paneles dejaran de recolectar radiaciones cuando ellas estén llenas y se desperdiciaría energía solar”, explicó Eduardo Ospina, gerente de Solenium.

    Además, y en esto concuerdan Ospina y Suarique, no usar baterías permite que el proyecto sea más amigable con el medio ambiente porque se evita las huellas de carbono que tienen estos materiales.

    Sumado a eso, merman los costos por mantenimiento pues el sistema tiene una vida útil de más de 25 años mientras que los de batería requieren de un cambio cada cinco.

    Con los módulos se espera que el bloque sea autosostenible en términos de energía y que sirva como impulso para que la Universidad Nacional los implemente en el resto de sus facultades y sedes.

    Hasta ahora, se tiene previsto que en el sistema se generarán 44.738 kilovoltios hora, con una reducción de 8,9 toneladas de dióxido de carbono al año.

    “Poner paneles solares es una muy buena alternativa para las instituciones educativas. Se vuelve rentable a largo plazo, ahorra costos de mantenimiento y es una gran alternativa de sistema para ayudar al medio ambiente”, concluye Santiago Ortega, experto en energías renovables y director de Innovación de Emergente Energía Sostenible.

    De hecho, el sistema funciona en edificios de la UPB, la UdeA, Eafit y empresas como Plaza Mayor y el centro comercial El Tesoro, entre otras apuestas por aportar a la sostenibilidad y a las energías limpias.

    ¿QUÉ SIGUE?

    SE EXTENDERÁ A SIETE EDIFICIOS

    La facultad pondrá a funcionar los paneles a partir de febrero, para ello deberá contar con el aval de EPM que certificará que funcionan de manera correcta y de acuerdo a los estándares de calidad.

    Esta es una prueba piloto que, de ser exitosa, se tomará como guía para implementarse en las demás facultades y sedes. Al menos siete edificios más contarán con este sistema en los próximos cinco años, según la decana.

    Para la Universidad Nacional el reto está en seguir implementando más medidas sostenibles como el vehículo eléctrico y la estación de carga para bicicletas, patinetas y motos eléctricas alimentados con paneles solares que ya cuenta.

    FUENTE: EL COLOMBIANO

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